viernes, 1 de noviembre de 2013 | By: Paco Lainez

Llegaste...



Llegaste arrasadora
como una marejada,
envuelta en una aureola
como llegan los sueños,
pasaron cuarenta otoños
y aún vivo recordando
aquella tempestad,
juvenil, arrolladora,
aún me sigo viendo
envuelto entre tus olas.